Reflexión
de biblioteca de aula y animación a la lectura
Considero que ha sido un
buen tema para finalizar la asignatura. El aprender a como estructurar tu
propio rincón de lectura en el aula es algo que se aproxima mucho a nuestra
tarea como futuras maestras. Además saber elegir para tus niños qué libros,
revistas, álbumes de imágenes, etc., es algo esencial.
Cada año, desde la implantación
de la LOGSE, el ministerio manda unas listas de sugerencias de libros para recomendarle
a nuestros alumnos. A pesar de esto nosotros debemos estar al tanto de las
novedades del mercado, ya que cada año salen muchos libros nuevos, y
seleccionar los más adecuados a las características de nuestro grupo de
alumnos. No debemos estancarnos en una serie de libros porque un año hayan
gustado mucho, cada grupo de niños es diferente, con gustos e intereses
diferentes.
Hay que tener en cuenta que,
al haber tantos libros entre los que elegir debemos motivar a los alumnos. Para
ello podemos realizar animaciones a la lectura. En infantil no se suele hacer,
se empiezan a hacer cuando los niños ya saben leer. La animación a la lectura
consiste en presentar de forma divertida y atractiva una serie de libros,
favoreciendo la autonomía y que sean ellos mismos los que después elijan cual
se quieren leer. Si siempre eligen el mismo tipo de libro hay que darle una
serie de pautas para que pruebe cosas nuevas. Para hacer una animación debemos
fijarnos en:
- La portada
- El texto
- La forma, que dependerá de los gustos,
las aficiones, etc. Es completamente subjetiva.
- El formato
- Los personajes, cuando se empieza a
explicarlos se crea un lazo afectivo entre el personaje y el libro.
Con todas estas partes
podemos hacer diferentes tipos de de animación:
- Enseñar la portada y el titulo, con eso
estamos favoreciendo a que se empiecen a crear las primeras hipótesis. También
podemos decirles sólo el titulo.
- Enseñarles las ilustraciones del libro y
que vayan haciendo hipótesis sobre el contenido.
- Leer una parte del texto, sin enseñar
ninguna ilustración ni la porta, y después preguntar cómo se imaginan a los
personajes, los espacios, etc.
Una buena animación ayuda a
acercarse más a los libros. Si, por lo contrario, hacemos una mala animación
los niños ya no querrán leerse ese libro, o tendrá menos interés por él.
Para finalizar, decir que estos
tipos de conocimientos me parecen esenciales aprenderlos en el grado de
educación infantil. Gracias al buen criterio de elección de los profesores he
disfrutado y aprendido mucho con esta asignatura. Espero poder tener la oportunidad
de aplicarlos en un futuro muy cercano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario